martes, 23 de junio de 2015

¿Por qué conservar las especies?
En numerosas ocasiones, después de una charla sobre conservación de flora, me he tenido que enfrentar a la siguiente pregunta, en estos términos o parecidos: ¿no habría que aceptar la extinción como un proceso natural y por tanto no hacer nada para evitarla? Efectivamente se trata de un proceso natural, es un hecho que las especies aparecen y se extinguen, pero en los últimos 100 años el hombre ha causado una extinción cuya magnitud no tiene precedentes. En la actualidad es difícil, cuando menos, delimitar la influencia de las causas naturales y de las humanas –directas o indirectas– en este proceso. A mí me gusta pensar que nuestra aportación a la conservación es un pequeño grano de arena, que viene a contrarrestar las agresiones que sufren a diario las especies. La experiencia que tenemos hasta ahora en el trabajo con especies amenazadas, nos está enseñando que una pequeña mejora en las poblaciones de algunas especies puede suponer su conservación a largo plazo.
Factores de amenaza
Muchas de las especies amenazadas lo están por causas naturales, es decir, se trata de supervivientes de épocas con unas condiciones climáticas diferentes a las actuales, que se refugian en hábitats muy concretos. No obstante, existen otros factores de amenaza, reales o potenciales, que se suman a las causas naturales (lo normal es que una especie esté amenazada por más de un factor) y sitúan a muchas especies al borde de la extinción. El hecho de que una especie esté amenazada por causas naturales, no nos debe hacer pensar que la especie va a desaparecer en breve, puesto que la extinción de las especies tiene en la mayoría de los casos un componente de azar, que es difícil predecir; una especie que tiene un área muy reducida puede extinguirse por un incendio, por ejemplo, pero puede ser que este incendio nunca se produzca. Tenemos un buen ejemplo en el sauce hastado de Sierra Nevada (Salix hastata subsp. sierrae-nevadae), del que Boissier, un naturalista suizo que visitó Sierra Nevada en 1837, indica su “escasez y falta de adaptación”, lo que llevó a algunos autores contemporáneos a considerar que se había extinguido, sin embargo después de 160 años, no sólo no se ha extinguido, sino que su población está exactamente igual que la describió este naturalista.
La biodiversidad en el EcuadorLa biodiversidad en el Ecuador

LA FAUNA


Aproximadamente 3800 especies de vertebrados, 1550 especies de aves, 320 especies de mamíferos, 350 especies de reptiles, 375 de anfibios, 800 especies de peces de agua dulce y 450 especies de peces de agua salada se han registrado en el Ecuador. Ecuador tiene más especies de aves que cualquier otro país de América Latina, ya que reúne el 18% de todas las especies existentes en el mundo. Aunque Brasil es 30 veces más grande que Ecuador, tiene el mismo número de especies de aves. Casi el 15% de las especies endémicas en el mundo se encuentran en la Sierra, la Costa y la Amazonía. Además, el Ecuador tiene la densidad de las aves más grandes del mundo. El suelo del Ecuador es el hogar de más de un millón de especies de insectos, de las cuales 2500 son nocturnas.

LA FLORA


El territorio de Ecuador recoge 25.000 especies de plantas vasculares. La familia de las orquídeas - Dodson ha identificado 2725 en el Ecuador - incluye aproximadamente el 11% de las especies existentes en el mundo y el 30% de las especies enumeradas en América Latina. Los Andes comprenden 1.050 especies, mientras que 850 fueron inventariados en la región amazónica y a lo largo de la costa;

Causas de la pérdida de biodiversidad:
· destrucción directa de las especies
· introducción de especies no autóctonas
· destrucción de hábitat
· dependencia entre especies, la desaparición de determinadas especies tiene consecuencias en muchas otras
Por qué en España hay tanta biodiversidad:
· está rodeado de océanos y mares
· uno de los países más montañosos de Europa
· gran diversidad climática
En la Sierra de Guadarrama coinciden varias provincias florísticas lo que aporta una gran biodiversidad a la zona.





Ecuador es uno de los países más ricos del planeta en términos de diversidad biológica y posee además una importante diversidad cultural. Su privilegiada ubicación geográfica en el neotrópico, su variado relieve e influencia de corrientes marinas, confluyen para construir el escenario de las más variadas formas de vida de flora, fauna y microorganismos, en su diversidad genética y de ecosistemas.